domingo, 8 de febrero de 2009

Apoyada en la pared

He salido huyendo despavorida,
intimidada, insegura,
confusa y arrepentida.
He salido huyendo por el miedo de hablar,
por el miedo de no saber interactuar,
de no gustar.
He salido huyendo en las narices de las personas,
escabulléndome entre las sombras,
restándome importancia y mintiendo.
He salido huyendo mientras la adrenalina
llenaba mi cuerpo.
Tuve miedo,
escalofriante y nítido miedo.

Las sonrisas de todos se unían,
me sentía cohibida.
No podía.
No daba.
Me fui antes de que me llamaran.
¿Qué iba a decirle a los otros,
a los que no conocía?
¿Qué iba a comer?
¿Cómo me habría de sentar?
¿Cómo lograría estar en mi hogar?
¿Cómo?
Si nunca ha pasado.
¿Cómo?
Si nunca me he dejado.

Me mantuve,
respiré,
me mantuve,
respiré.
No deje que nadie me encontrara,
quién sabe,
si para empezar,
la gente me buscaba.
Huía porque no había más,
porque había más que desconocía
y me infiltraba en un cuadrado perfecto
que no se rompía.
En un cuadrado aislado,
escribiendo mi cobardía.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

cobardia?? mas bien esperanza creo yo, de dejarte tocar por los demas =)
bien itzii vas destejiendoo el interior

Anónimo dijo...

La gente te busca, es una verdad sin vueltas. Esconderse es una solución provisoria.

Instinto Femenino dijo...

Me gusta tu estilo.

Mariela Alatriste dijo...

Yo sé que huías de mi :)

Y claro que te quiero, te quiero matar por haber hecho que me bailaran en teatro :/

Olvidado dijo...

Cobardía, coincidentemente hoy en uno de mis tan ausentes posts me dije que la cobardia suele ser la maestra titiritera del teatro de nuestra existencia.

Espinosa verdad.

Es mejor darle la espalda... pero no a la cobardía eh, dale punche.

Gustavo dijo...

Yo supe estar así, también.

Luciano dijo...

te lo cambio por uno color verde, o no hay trato.

LAO dijo...

Muy bueno! No es malo esconderse, a veces es por algo que no nos sentimos
cómodos y nos refugiamos instintívamente.Ya se verá a su tiempo.Felicidades.