miércoles, 25 de febrero de 2009

Úrsula y su hija explotada

Eres la que tienes que fingir día a día para sobrellevar a quien te da vida y alabar a quien te la quita. Tienes una pierna a punto de ser amputada y los recibos médicos que se acumulan en la gaveta de quien más te estima y a la que más sobreestimas explotándola por conveniencia de los que según tú, te necesitan.

Le ves la cara de estúpida a la pobre y ella se deja con tal de que tú ya no grites, mientras a escondidas le sacas el dinero del monedero para repartirlo ante aquellos que se acaban la comida, la luz, el teléfono sin dar un solo peso a la casa que tu pobre hija explotada sostiene de madrugada.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Mis brazos se han cansado

Crías cuervos, crías ratas, que engruñen
mientras te sacan los ojos,
fuerte oigo tu voz
riéndote de sus gracias.

Darte una taza de tu propio chocolate,
anhelo,
me encuentro demasiado blanda,
atada.

Tiendo la mano,
estas llorando,
se hunde el barco.
¡Mira que casualidad!
Tus crías son las primeras en zarpar
dejándote a merced del mar.
Como siempre, soy yo la que tiene que remar.

lunes, 16 de febrero de 2009

Entiende

Entiende, entiende, el ya murió.
Entiende, entiende, primero estas tú.
Entiende, entiende, deja de manipular.
Entiende, entiende, deja con odio de mirar.
Entiende, entiende, estando parada te lastimas más.
Entiende, entiende, es la ropa a la que lavas
a la que le tienes que reclamar.
Entiende, entiende, el no te puede sobrellevar.
Entiende, entiende, no puedes hacerla gastar.
Entiende, entiende, no puedes dar lo que no tienes.
Entiende, entiende, cada quien debe de valerse.
Entiende, entiende, ella es la que más te quiere.

sábado, 14 de febrero de 2009

Somos todas putas (Maquillaje)

Te agarra sin darte cuenta.
te cosecha,
te pule,
te limpia.
Ya en el mostrador,
estás a la venta al mejor postor.

viernes, 13 de febrero de 2009

Me verás sentada sola

Si la soledad tuviese nombre,
quizás llevase el mío.
Apoyada en una pared blanca,
viendo un transporte colectivo,
me pregunto que estoy haciendo
sin hacer nada
apoyada en esta pared que sostiene mi espalda.
Sin hablar con quien está a mi costado
se está pensando,
que aburrido es estar a mi lado.

jueves, 12 de febrero de 2009

Cursi

Yo soy la última en enterarme
de lo que pasa en este rincón.
(Acto seguido señalo mi corazón).

miércoles, 11 de febrero de 2009

Heroína muerta

Tengo la información correcta
de ese sueño que tantas veces piensas,
un ideal preñado que se niega a nacer
en un mundo tan deshumanizado.

La intención de cambiar al mundo
de fumarme utopías,
de volar entre miserias,
sonriéndole a la vida.

Tengo todas las ganas
aunque no me lo creas
parar de escribir,
no necesitamos más poetas.
Agarrar las armas,
viajar por el mundo,
cambiar destinos,
inspirar poemas.

Fracasar,
hundirme entre la mierda,
siendo capaz de decir:
escribí mi propia tragedia.

Mi éxito rotundo
se exorcizó ante las palabras
no escritas
no dichas,
olvidadas.

Luchar cuerpo a cuerpo,
sin temor a la caída,
cobardía que agoniza
al ver en otros la acción,
lo que siempre se imagina.

Si, en serio,
tengo la información,
el ideal,
la intención,
no sé qué hacer con ellas.
Soy una más escribiendo,
suicidándosele el heroísmo
diciendo conocer la respuesta.

lunes, 9 de febrero de 2009

Masturbación

Me tengo que ir.
Ya lo sé,
ya sé que te tienes que ir.
¿Entonces?
No quiero que te vayas,
quiero que te quedes aquí,
tirarte en la cama,
hacerte feliz,
que me hagas tú a mí.

No puedo perderte,
necesito tenerte,
hacerte el amor,
poseerte.

Levantarme cada día,
encontrarme a tu lado,
vivir entre tus labios,
suspirar tu olor,
embargarme en tus brazos.

Despertando tus ojos observando,
mis manos acariciando
cada rincón de piel.
Sosteniendo tu rostro
entre mi cansancio.
Acurrucándome despacio
al hueco que encuentro
entre tu cuello y tus parpados.
Sonriendo al saber
velas mi sueño
como un niño,
que se doblega ante su amo.

domingo, 8 de febrero de 2009

Apoyada en la pared

He salido huyendo despavorida,
intimidada, insegura,
confusa y arrepentida.
He salido huyendo por el miedo de hablar,
por el miedo de no saber interactuar,
de no gustar.
He salido huyendo en las narices de las personas,
escabulléndome entre las sombras,
restándome importancia y mintiendo.
He salido huyendo mientras la adrenalina
llenaba mi cuerpo.
Tuve miedo,
escalofriante y nítido miedo.

Las sonrisas de todos se unían,
me sentía cohibida.
No podía.
No daba.
Me fui antes de que me llamaran.
¿Qué iba a decirle a los otros,
a los que no conocía?
¿Qué iba a comer?
¿Cómo me habría de sentar?
¿Cómo lograría estar en mi hogar?
¿Cómo?
Si nunca ha pasado.
¿Cómo?
Si nunca me he dejado.

Me mantuve,
respiré,
me mantuve,
respiré.
No deje que nadie me encontrara,
quién sabe,
si para empezar,
la gente me buscaba.
Huía porque no había más,
porque había más que desconocía
y me infiltraba en un cuadrado perfecto
que no se rompía.
En un cuadrado aislado,
escribiendo mi cobardía.

miércoles, 4 de febrero de 2009

Ya no te quiero

El switch sigue prendido,
yo simplemente cierro los ojos,
y hago como que olvido.
¿No era lo que anhelabas,
que te dijera que ya no te amaba?
Por eso me contabas historias
de tus brazos succionando
otros labios,
por eso te alejabas,
no es que fuera
demasiado buena
era que no podías con la carga
de que alguien te quisiera
mucho más de lo que tu esperaste
que lo hiciera.

Eres tan frágil,
apenas me atrevía a tocarte,
me daba miedo romperte.
Pero te vas con quien
te agarra como si fueses plastilina,
te gusta y regresas
¿Qué más da lo que yo sienta?

Querías cuatro palabras
para dejar de preocuparte por mí,
ahí están,
tómalas,
ciertas o falsas,
te las cedo,
para que puedas hacer
lo que quieras con ellas:
Ya no te quiero.

lunes, 2 de febrero de 2009

Vomitar

Cantemos a la luna,
cantemos a la noche,
cantémosle a las heridas,
cantémosle a los hombres.

Salud por otro día,
salud por no tenerlo,
salud por la melancolía,
salud por perderlo.

Brindemos al compás
de una canción triste.
Brindemos al compás
de quien llora y ya no espera,
que no sabe qué tan sincero fue
pero que lo sintió hasta desfallecer.
Brindemos, lloremos:
¿Qué más nos queda?

Cantemos porque no tenemos,
cantemos porque queremos,
cantemos mientras nos quede voz,
mientras nos queden ganas,
mientras tengamos historia,
que si algo obtuvimos fueron
recuerdos y memorias.

Cantemos a la gloria,
cantemos a la agonía
cantemos por cantar.
¡A la par fingiendo alegría!

Brindemos, cantemos, lloremos:
¿Hay otra salida?